Aunque la enfermera de la Covid-19 ya no representa una emergencia de salud pública a nivel internacional, en Nicaragua el personal de salud no da tregua a las enfermedades infecciosas, por lo que a diario visitan los hogares para inmunizar a la población.
Este lunes, habitantes de la zona rural de Mateare abrieron sus puertas al personal de salud y aplicarse la vacuna contra el Covid-19.
La directora del centro médico, Tania Tercero explicó que, gracias a estos esfuerzos, la enfermedad se encuentra controlada en el país.
Alison Palacios completó su esquema de vacunas de este año y agradeció a los médicos y enfermeros por llevar la vacuna hasta los hogares, ya que algunas veces las tareas domésticas les impiden a las mujeres acudir a los centros de salud.
Agregó que, gracias a las vacunas, su familia no se ha enfermado y si pasan por una gripe, su salud no se ve complicada.
Periodista: Tania Sirias
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