Varias ciudades de Brasil, como São Paulo, Río de Janeiro y Belo Horizonte, enfrentan una intensa ola de calor, con temperaturas que oscilan entre 35 y 42°C. Se espera que esta situación se prolongue hasta el 21 de febrero, afectando a millones de personas.
La Defensa Civil de São Paulo emitió una alerta especial, advirtiendo sobre el aumento de temperaturas entre el 16 y el 19 de febrero. En Río de Janeiro, el Sistema de Alerta pronostica que esta semana podría romper récords de calor, con temperaturas cercanas a los 41,8°C registrados en 2023.
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Para mitigar el impacto, la Alcaldía de Río activará hasta 58 puntos de refrigeración en parques y villas olímpicas si se alcanza el nivel de calor 4. Esto permitiría a la población acceder a zonas de sombra, puntos de hidratación y baños públicos.
Las autoridades recomiendan evitar la exposición al sol entre 10:00 y 16:00 horas, usar ropa ligera, protector solar y mantenerse hidratado. También se sugiere reducir actividades físicas al aire libre durante las horas de mayor temperatura.
Fuente: teleSUR